
Miguel no suele ir de campamento en verano. Es una opción que está ahí, por la que muchas familias optan, a veces por la incompatibilidad de los trabajos, a veces para que los chicos tengan una actividad extra, a veces para que en verano se relacionen de otra manera...
Pero en nuestro caso, no es una opción que consideramos. Miguel acudió a un campamento en 2012 y aunque todo fue muy bien, creo que me pasé de atrevida y de exponer a Miguel a un estrés...